Los amarillos llegaron con ventaja al último acto pero acabaron sucumbiendo ante Galatasaray.
Los prolegómenos del partido estuvieron marcados por el minuto de silencio guardado en memoria de la leyenda Greg Stewart, fallecido recientemente. También por la presencia de un nuevo jugador amarillo, Niko Radicevic. Los claretianos se jugaban dar un paso claro hacia los cuartos de final ante un Galatasaray reformado pero sin otra opción que no fuera ganar para seguir vivos.
El equipo turco formó en el quinteto con el base lituano Juskevicius, incorporado recientemente. Fue Eriksson quien anotó la primera canasta de la noche en una penetración contestada por Richard Hendrix. El ex del Herbalife Gran Canaria también participó, y activamente, tras no hacerlo en el encuentro disputado en Estambul. El conjunto isleño había hecho la primera canasta del encuentro pero fueron los de Mahmuti quienes llevaron el peso del encuentro a través de la anotación. Dos libres de Hendrix ponían tres arriba a los suyos (9-12, minuto 5) llegados al ecuador del cuarto.
Tuvo alguna ventaja pírrica el conjunto dirigido por Luis Casimiro pero en las alternancias siempre acababa siendo favorecido el Galatasaray. DaJuan Summers, otra cara conocida, anotaba un triple para recuperar la renta del equipo otomano. Debutaba el base serbio Niko Radicevic y dos aciertos suyos desde la línea de 4,60 servían para cerrar el cuarto con un pequeño parcial de 4-0 que permitía a los isleños acabar a solo un punto (21-22).
El ritmo anotador del primer cuarto disminuyó considerablemente en el segundo. Lo que estaba claro es que Galatasaray, a diferencia de lo mostrado en el choque disputado en el Sinan Erdem de Estambul, era un equipo. Con todas las letras, con nociones ofensivas, con hambre en el rebote, y con intensidad defensiva. Mahmuti, con tiempo para trabajar y nuevos mimbres, fue capaz de preparar mejor a los suyos.
Por eso no dudó ni un segundo en parar el choque tras un parcial de 6-2 con mate de Brussino que significaba la remontada momentánea de los locales (31-30, minuto 16). El tanteo era bajo y no parecía surtir efecto el tiempo muerto, pues Gal Mekel realizaba una acción de dos más uno para abrir distancias. El Herbalife Gran Canaria había cogido las riendas del encuentro, pero sin demasiada fuerza. Del 37-33 que marcaba el electrónico a dos del final se pasó al 39-40 con el que se llegó al descanso tras cinco puntos de Walker y dos de Hardy (39-40).
Caras opuestas
La segunda mitad del Herbalife Gran Canaria ofreció dos caras totalmente opuestas del equipo de Luis Casimiro. La cara buena se apreció en el tercer cuarto. El paso por vestuarios ayudó a los amarillos, que una noche más no podían contar con Paulí, Oliver ni Báez. Tras un intercambio de canastas entre Aguilar y Hendrix, los claretianos lograron un parcial de 9-0 con triples de Aguilar y DJ Seeley que obligó al técnico visitante (51-42, minuto 23) a pedir tiempo muerto.
La ventaja isleña llegó a ser de diez puntos después de cuatro puntos consecutivos sin respuesta visitante de Ondrej Balvin. El tercer cuarto tuvo claro color amarillo y la defensa ahogaba las ideas de los de Mahmuti, que era incapaz de dar con la tecla. Tuvo opciones de romper un poco más el choque el equipo grancanario, pero no llegó a materializar esas oportunidades. El talento individual de Galatasaray y cuatro puntos seguidos de un desaparecido Arar permitían a los turcos llegar al último cuarto con opciones (62-57).
Y llegó el momento de la cara opuesta. El Galatasaray dominó el cuarto período. Alex Renfroe lo abrió acertando de tres para apretar las cosas y rápidamente el encuentro transcurrió de empate a empate. Herbalife Gran Canaria mandaba de manera fugaz antes de que un nuevo empate apareciera en el luminoso del pabellón de Siete Palmas. Dos tiros libres de DJ Seeley que acababan dentro de la canasta daba tres de ventaja (70-67, minuto 36) a los suyos con 4:28 minutos por delante.
Galatasaray, entonces, se puso por delante. No lo conseguía a pesar de empatar en repetidas ocasiones y lo logró en el momento justo. Hardy anotó dos tiros libres, Balvin los erró en la posesión claretiana, y un triple del conjunto turco obligaba a Casimiro a parar el partido con 3:50 minutos por delante y una desventaja de dos tantos (70-72).
Esos casi cuatro minutos fueron un infieron para el Herbalife Gran Canaria. El parcial final fue de 6-15. El momento clave ocurrió a poco más de dos minutos del final del choque, cuando DaJuan Summers, que acababa de sumar dos tiros libres, clavaba un triple para mandar la diferencia hasta los nueve (70-79). No tuvo opciones el cuadro amarillo, que acabó cediendo por 76-87. A pesar de la derrota, el Herbalife Gran Canaria sigue dependiendo de sí mismo para acceder a cuartos de final del torneo. El partido en Berlín del próximo martes será clave en las aspiraciones isleñas.