El equipo claretiano se rehízo a un mal inicio de partido pero no pudo llevarse el triunfo tras un último cuarto de dominio bilbaíno.
Era una noche grande para Miribilla. Antaño lugar de épica y escenario incluso de Euroliga, el Bilbao Arena albergaba una lucha contra el descenso muy real para los suyos. La afición estaba y el equipo respondió con una salida que pilló desprevenido a un Herbalife Gran Canaria muy espeso.
Los de Veljko Mrsic hicieron de la necesidad virtud. Con un juego rápido liderado por Jonathan Tabu, el RETAbet Bilbao Basket logró un parcial de salida de 10-0 en poco más de tres minutos con triples de Lucio Redivo y Pere Tomàs. Tuvo que ser un voluntarioso Eulis Báez quien abriera el casillero de puntos de los claretianos. Fue en una acción trabada, de poca clarividencia, que dejaba a las claras los problemas que tenía la ofensiva del conjunto de Luis Casimiro para sumar en ataque.
En defensa tampoco había muchas respuestas a lo propuesto por el conjunto vasco. Un triple de Redivo, de esos que hacen levantar al público, obligó al técnico claretiano (15-2, minuto 6) a pedir tiempo muerto. Dos puntos en más de medio cuarto y quince encajados eran un bagaje que era necesario subsanar. El manchego logró que los suyos espabilaran en labores atacantes, con triples de Rabaseda y Oliver, pero los ‘hombres de negro’ siguieron mandando y controlando el tempo del partido (24-13).
El final del cuarto fue lo mejor que le podía pasar a un Herbalife Gran Canaria que procuraba de un tiempo de descanso para refrescar las ideas, cambiar el chip y ponerse el mono de trabajo. Lo consiguió desde el banquillo el conjunto amarillo y enfiló el segundo cuarto dispuesto a la remontada. Llegó poco a poco y con la figura dominante de Ondrej Balvin como una de las claves. El pívot checo fue desolador para la escuadra local y dos puntos suyos en el tiro libre culminaron un parcial de 2-14 (26-27, minuto 16) que permitió a los insulares obtener su primera ventaja en todo el encuentro.
No miró atrás un Herbalife Gran Canaria que no se achantó ante el gran ambiente de un Bilbao Arena hastiado por las decisiones arbitrales. El trío colegial volvió a estar una semana más en el punto de mira de la afición, que no entendió varias decisiones. Los claretianos aprovecharon sus viajes a la línea de 4,60 para ampliar la ventaja y en defensa eran capaces de secar cada vez más a un RETAbet Bilbao Basket desesperado en actitud y juego. Dos triples de Mekel y Rabaseda permitieron a los amarillos cerrar el primer tiempo con nueve de renta, la mayor hasta aquel momento (35-44).
La locura de Redivo
El paso por vestuarios enfrió los ánimos de un RETAbet Bilbao Basket acelerado, pero no el del respetable del recinto de Miribilla. Apretaba la afición y, a pesar de una canasta de DJ Seeley que enviaba la diferencia por encima de los dobles dígitos, dos triples de Jonathan Tabu (43-48, minuto 23) volvía a apretar las cosas y forzaba a Casimiro a pedir tiempo muerto. No sirvió de mucho, pues el conjunto local siguió acercándose peligrosamente.
Ni tan siquiera dos triples en cuestión de segundos de Mekel y Aguilar (48-58, minuto 26) daban tranquilidad al conjunto grancanario. El RETAbet Bilbao Basket seguía siendo mejor en el tercer acto y no se aceleró por verse otra vez a diez puntos. Se encomendó, mejor, a Lucio Redivo. El argentino fue clave en un parcial de 10-0 que permitió a los locales empatar anotando un dos más uno y un triple tras paso atrás que enloqueció al pabellón. El Herbalife Gran Canaria se las apañó para cerrar el cuarto con una pírrica ventaja que, eso sí, no anulaba la peligrosa inercia positiva de los bilbaínos (62-63).
Mumbrú abrió fuego bajo el aro en el último cuarto y poco después le siguió un espectacular Lucio Redivo (67-63, minuto 32) con un triple que hacía despegar a los suyos como no lo habían hecho desde el arranque del encuentro. Quedaba un mundo pero el RETAbet Bilbao Basket parecía campar a sus anchas sobre el parqué, consciente de la oportunidad que se le presentaba. Redivo, que acabaría la noche con 31 puntos y 6/11 en triples, clavaba otro lanzamiento exterior y Casimiro lo paraba (74-67, minuto 35) con más de medio cuarto por delante.
No iba a surtir efecto ninguna indicación. El conjunto isleño no conseguía parar al argentino y se sumaba a la fiesta un incisivo Pere Tomàs, que cerró el encuentro con 14 puntos y 4 rebotes, y que fue clave para sellar el triunfo bilbaíno cuando el Herbalife Gran Canaria intentaba pelear el choque hasta los últimos minutos. No pudo hacerlo y el Bilbao Arena, que había explotado de júbilo cuando aún restaba más de un minuto, acabó celebrando un triunfo que permite a los suyos escapar un poco de la zona baja.
Por su parte, la escuadra claretiana mira ya hacia el domingo, cuando recibe a un rival directo en la carrera por el Playoff como es UCAM Murcia.