Fue uno de los últimos en llegar el pasado verano, y en su primer año como profesional, Oriol Paulí ha demostrado estar capacitado para jugar al más alto nivel.
«Creo que mi primer año ha sido bastante positivo». Así se expresa Oriol Paulí Fornells, que a sus 21 años acaba de concluir su temporada de debut como jugador profesional. Tras formarse durante ocho años en La Masía con el FC Barcelona, Paulí dio el salto al profesionalismo de la mano del Herbalife Gran Canaria y de Aíto García Reneses. «A nivel individual he podido mejorar muchas cosas de mi juego, aunque quedan muchas por mejorar y seguir trabajando» explica. Tanto es así, que ha sido el último jugador del primer equipo en irse de la isla, realizando tres semanas de trabajo de postemporada. «He mejorado mucho, y la integración en el equipo ha sido muy buena desde que llegué. Haber llegado a la final de la Eurocup ha sido algo positivo, hemos hecho historia.»
Para un jugador no solo se trata del salto al profesionalismo, sino de vivir una vida totalmente diferente. Aunque Paulí realiza un matiz. «No es la misma situación, pero desde los 12 años llevo viviendo solo, lejos de la familia» comenta, si bien admite que «estando en Barcelona, quieras que no, estaba cerca de ellos, a solo una hora» explica. «Este año ha sido diferente pero mentalmente llegaba fuerte por haber vivido tanto tiempo fuera de casa. Sí es cierto que ha habido momentos de la temporada que se hacen más duros cuando llevas tiempo sin ver a tu familia.» El jugador, que hizo buenas migas especialmente con los jugadores jóvenes del primer equipo, dice que «el equipo siempre ha estado a mi lado, siempre que he necesitado algo me lo han dado y estoy muy contento por eso, por el equipo y los compañeros que me han tocado.»
La confianza de Aíto García Reneses ha sido progresiva, pero siempre estuvo presente. «No pensaba que fuera a tener minutos, y poder salir en el campo del Madrid en mi debut en la ACB fue una alegría inmensa» rememora el catalán, que con 20 años jugaba sus primeros minutos en el primer encuentro de temporada. «Ha habido muchos partidos importantes, que han sido positivos para mí.»
Paulí tuvo minutos en 32 de los 36 partidos que disputó el equipo en Liga Endesa, además de ser un jugador muy utilizado también en el exitoso curso de Eurocup. Uno de sus mejores partidos, quizá el primero en importancia, fue el que firmó ante Movistar Estudiantes. Jugó su tope de minutos (22), anotando 10 puntos y dejando para el recuerdo varios vuelos imposibles. «En ese momento no eres consciente de lo que está pasando, estaba concentrado en lo que me pedía el entrenador y no tuve tiempo de pensar en que me estaban ovacionando». Pero lo hizo. La afición claretiana coreó su nombre en un choque que, claramente, decantó con su energía. «Escuché que la gente estaba muy contenta y es una satisfacción personal muy grande. Creo que con el tiempo lo valoraré más. Ahora que tenemos unos días de descanso podré valorar más esos partidos» comenta, «y sobre todo el cariño que me ha transmitido la afición desde que llegué aquí.»