El Herbalife Gran Canaria supo sobreponerse a la derrota en Turquía para vencer al equipo obradorista por 68-80 en un choque marcado por la defensa zonal de los de Moncho Fernández.
Salió fuerte el Río Natura Monbús Obradoiro, que arrancó dominando con un parcial de 7-0 a un Herbalife Gran Canaria que, sin llegar a jugar cabizbajo, sí lo hacía a un ritmo inferior al que acostumbra el grupo de Aíto.
Sin embargo, con mayor o menor ritmo, los claretianos no renunciaron en ningún momento a su estilo. El conjunto dirigido por Moncho Fernández optó por defender en zona y realizar continuos cambios, y los amarillos respondieron lanzando desde 6,75. Salin, por partida doble, y Pangos, anotaron los primeros 9 puntos isleños de la tarde desde el perímetro (11-9, minuto 5), permitiendo a los grancanarios resistir la embestida obradorista.
A siete del final del cuarto, Oliver anotó dos tiros libres para poner por delante a los suyos, pero el Río Natura Monbús Obradoiro fue capaz de seguir mandando (21-18).
La defensa claretiana siguió a una gran intensidad en el segundo período, y los frutos no tardaron en aparecer. Los de Aíto salieron lanzados y Xavi Rabaseda personificó los valores del juego isleño. El catalán anotó 10 puntos con dos aciertos de tres y una fácil bandeja tras una buena defensa colectiva (21-27, minuto 14), obligando a Moncho Fernández a pedir tiempo muerto.
No sirvió de mucho, puesto que la diferencia llegó hasta los dobles dígitos tras una canasta de Omic en rebote ofensivo y dos tiros libres de Báez tras recibir una antideportiva. Amagó con la reacción el conjunto gallego a través de Caloiaro y su muñeca, pero para mano la de Salin. El finés, con un triple, selló la primera mitad con la mayor renta de la tarde hasta el momento (26-39).
Tras el paso por vestuarios el equipo local tiró de orgullo. Brown, que en la pintura no podía imponer mucho, aprovechaba su buena mano para clavar desde fuera. Él y McGrath fueron los protagonistas por parte del cuadro local, que poco a poco se acercaba (38-44, minuto 25) en el electrónico, si bien los amarillos mantenían distancias ciertamente tranquilizadoras.
Se volvía a distanciar el Granca por mediación de Sasu Salin, que anotó hasta cinco triples en Santiago. Los amarillos tiraban y tiraban desde 6,75 debido a la perpetua zona 2-3 plantada por los obradoristas. Sin embargo, los gallegos se ponían a cuatro tras cinco puntos seguidos de Haws, reacción neutralizada por Omic y Newley (51-59).
La ventaja llegaba hasta los doce puntos en el arranque del último cuarto tras un gran 3+1 de DJ Seeley. Rebote cerrado, transición rápida y canasta de Omic que obligaba a Moncho a pedir tiempo muerto (51-65, minuto 32) viendo que llegaba la máxima diferencia del encuentro. Durante el último cuarto amagó muchas veces el Obra con amenazar con un final apretado, pero no consiguió cercar a un Herbalife Gran Canaria que jugó con tranquilidad, gozando de muchas segundas oportunidades en ataque debido a la zona obradorista, que les impedía cerrar el rebote.
Al final, un triunfo por 68-80 que afianza al equipo amarillo en la quinta plaza, más aun si cabe con la derrota de Montakit Fuenlabrada.