El Herbalife Gran Canaria sumó un vital triunfo en su visita a la pista de un UCAM Murcia que dominó pero no supo matar el choque.
La puesta en escena del Herbalife Gran Canaria fue óptima y contó, un día más, con la presencia de Ovidijus Galdikas. El pívot lituano volvió a salir de inicio y, nuevamente, firmó minutos de mucha calidad. Ni él ni nadie pudo parar, eso sí, a un Serhiy Lishchuk que fue líder claro de los pimentoneros en los compases iniciales. El constante intercambio de golpes no hacía más que suceder empates en el electrónico. Omic, bajo el aro, igualaba (9-9, minuto 5) a pase de un Oriol Paulí que fue uno de los primeros amarillos en saltar a cancha desde el banquillo.
El alero catalán lideró una segunda unidad en la que también destacó DJ Seeley. El estadounidense parece encontrarse cada vez más cómodo en la pista y logró anotar cinco puntos en su primera salida, los mismos que un Paulí que se colgaba del aro en transición para, nuevamente, igualar el partido. Solo un triple de Kelati sobre la bocina del primer cuarto evitó que se llegara con empate al segundo acto (22-19).
Siguió lloviendo desde más allá de 6,75 en el aro amarillo. Cabezas primero, y Kelati de nuevo, ponían nueve de diferencia (28-19, minuto 12) con apenas dos minutos de cuarto disputados. El Granca no lograba encontrar espacios en ataque y sufría para ver el aro. Pasaron casi cuatro minutos hasta que Sitapha Savané cortó la sequía con un escorzo en la media vuelta.
UCAM Murcia, a pesar de tener a los amarillos contra las cuerdas, no conseguía tampoco anotar con facilidad. El equipo claretiano se agarraba a un triple de Pablo Aguilar para no perderle la cara al choque. Su tiro, y el de Savané, fueron los únicos dos que anotó la escuadra grancanaria en juego en todo el segundo cuarto. Omic, con tres tiros libres, maquillaba una mala estadística. El Granca, eso sí, seguía vivo (34-27).
Pero le faltaba oxígeno al Herbalife Gran Canaria tras la reanudación. Campazzo se hizo dueño y señor del espectáculo y no tardó en comandar un parcial de 7-2 con el que se iban de doce puntos. Pangos robaba y anotaba, pero la ventaja llegó a ser de trece puntos después de un inverosímil triple del ‘Facu’. El internacional argentino lo metía todo y el Palacio murciano estallaba de júbilo (48-35, minuto 26) al ver que su equipo dominaba a los grancanarios.
Poca fluidez, pocas ideas y poca actividad en ataque. El papel amarillo, sobre todo en labores ofensivas, estaba siendo de suspenso. Pero los de Aíto, esta vez, no bajaron los brazos en ningún momento. DJ Seeley puso la chispa necesaria con un 2+1 y la mecha pronto prendió. Triple de Newley, otro de Aguilar, y Katsikaris con cara de incrédulo desde la banda. Nuevamente anotaba Newley para el 0-11 de parcial y poner a los claretianos a solo dos; pero UCAM Murcia reaccionaba con tres puntos sin respuesta.
Albert Oliver, voluntarioso como siempre, intentaba anotar desde más allá de 6,75 y su tiro chocaba directamente con el tablero antes de ir al aro. En esa misma jugada, tras rebote ofensivo de DJ, el catalán no se cortaba para lanzar nuevamente… Y anotar. De eso se trató para el Granca en la mañana murciana: de intentarlo, de luchar y de seguir mirando a canasta aunque los tiros no entrasen. Con esa filosofía, DJ enfiló aro tras robo, y Aguilar anotó dos tiros libres para poner por arriba a los amarillos. Antes del final del cuarto, la igualada volvía al marcador (55-55).
Partido nuevo de diez minutos que empezaba ganando UCAM Murcia. Campazzo lideró un parcial de 7-2 con el que volvía a poner contra las cuerdas a un Granca que siempre estuvo cerca de la lona pero que jamás se rindió. Jamás tocó su cuerpo la arena y el terrero se hizo cada vez más grande para unos isleños cuya resistencia era absoluta. Empezó entonces a destacar Sasu Salin. El finés, que desde la baja de Kyle Kuric ha tenido que tomar muchísimas responsabilidades sicológicas y físicas, encontró un momento de brillo para anotar seis puntos en un parcial de 2-10 con el que los grancanarios tomaban tres de ventaja (64-67, minuto 37).
El carioca Benite se hacía protagonista con cinco puntos consecutivos para poner por delante a los murcianos, pero Pablo Aguilar clavaba un triple que enmudecía el Palacio. Newley, vital durante todo el choque con su característico empuje, palmeaba un tiro importantísimo. Luego Cabezas, en la línea, anotaba solo un tiro para poner el 70-72 a 47,4 segundos del final.
Los últimos segundos fueron un compendio de desaciertos y nerviosismo, pero el equipo claretiano estuvo más tranquilo para sumar un triunfo muy importante de cara a la inminente lucha por la Copa del Rey.
Ficha técnica
71 – UCAM Murcia (22+12+21+16): Campazzo (10), Rojas (4), Wood (11), Antelo (2) y Lishchuk (13) -cinco inicial-, Martín (-), Cabezas (7), Benite (13), Radovic (1), Kelati (6) y Lima (4).
75 – Herbalife Gran Canaria (19+8+28+20): Pangos (6), Salin (11), Newley (11), Báez (2) y Galdikas (4) -cinco inicial-, Oliver (6), Savané (2), Seeley (10), Paulí (5), Rabaseda (-), Omic (7) y Aguilar (11).
Árbitros: Emilio Pérez Pizarro, Luis Miguel Castillo Larroca y Rafael Serrano Velázquez. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de la Liga Endesa de baloncesto que se disputó en el Palacio de los Deportes de Murcia ante 5.876 espectadores. Antes del inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de Randy Owens, primer jugador extranjero que tuvo el entonces llamado Júver Murcia mediada la década de los ochenta; y del presidente y dueño del Real Murcia Club de Fútbol, Jesús Samper, ambos fallecidos recientemente. Los jugadores del UCAM CB llevaron crespones negros en sus camisetas.