El entrenador ayudante del Gran Canaria analizó el inicio de una EuroCup que estrena formato.
«Empezamos una fase de la temporada bastante exigente. Hasta ahora estábamos jugando un partido por semana y ahora empieza todo lo que conlleva jugar una competición europea; jugar dos partidos a la semana, prácticamente no tener tiempo para entrenar. La afrontamos con muchísima ilusión. La EuroCup para nosotros fue la temporada pasada muy positiva. Con el paso de los meses, lo que supuso estar en semifinales, y muy cerca de llegar a la final, para nosotros fue un hito importante. También somos conscientes de que cada año la EuroCup es mucho más complicada, hay un cambio de formato que creo que favorece al espectador. Pasamos a tener una liga regular de 18 partidos, que enriquece la competición, te pone en un número de partidos casi a los que jugábamos en años anteriores llegando a la final. Destacaría sobre todo el nivel de los equipos, que ha subido muchísimo. Hay muchos equipos con un potencial económico, físico, cerca del nivel de Euroliga».
«Cedevita es uno de los equipos que hizo una gran EuroCup, que ha mantenido el bloque de seis jugadores eslovenos, cinco que jugaron contra nosotros la temporada pasada, y luego Luka Rupnik, que lo ficharon a mitad de temporada. Lo primero, destacar que este bloque de jugadores eslovenos son jugadores de muchísima calidad, encabezados por Jaka Blazic, que el año pasado fue uno de los jugadores más importantes de la competición. Jugadores, que aparte de tener mucha experiencia, conocen la Liga Endesa, tanto Blazic como Rupnik. Luego han fichado a cinco jugadores norteamericanos nuevos, los han cambiado a todos. Creo que también añadiendo muchísimo puntos y calidad, desde el puesto de base con Keene, que es un jugador tremendamente peligroso. Otro jugador peligroso que ya jugamos ante él en Mornar la temporada pasada, Jacob Pullen, que también les da muchísima versatilidad, capacidad de anotar desde la línea de tres puntos. Y luego, mucho físico, con Ejim, Auguste y Carmichael. Un equipo muy duro con mucha versatilidad, muchos puntos, velocidad, y que sabemos que tenemos que estar al máximo de nuestra intensidad porque empieza la competición y ellos son un equipo muy peligroso».
«Es el primer año de este formato, primero tenemos que pensar en la fase regular, que es bastante larga, que nos va a llevar meses, con 18 partidos. Sí que es verdad que esa siguiente fase se presta a que haya alguna sorpresa al ser a partido único, también le da un componente de emoción bastante importante. Creo que lo principal es el espectador en este formato, donde vamos a jugar nueve partidos en casa ante muy buenos equipos, contra equipos con potenciales muy altos y luego intentar, lo primero estar clasificado para esa siguiente fase y luego en la mejor posición posible, para en caso de posibles cruces, poder jugarlos en casa, sabiendo el peligro que conlleva esas eliminatorias a partido único».