El entrenador claretiano comentó que el equipo está mentalizado para hacer un buen partido y comentó que es «motivo de orgullo» el apoyo de toda la isla.
«Es un partido muy difícil. Estamos contentos por haber llegado a donde estamos, pero ya que estamos aquí y que en el baloncesto cualquiera puede ganar, queremos ganar.»
«Lo de la presión depende de cómo se lo tome cada uno. Además, ya hay jugadores lo suficientemente expertos como para que la presión se note menos. La diferencia teórica es bastante grande pero tendremos nuestra pequeña opción de ganar.»
«Aquí estoy palpando que la gente se da cuenta de que el potencial del Khimki es muy grande y sabe que para nosotros es muy difícil pero que tenemos alguna opción. Existe una ilusión colectiva muy grande pero no existe la creencia mayoritaria de la Copa de que debíamos ganar.»
«Debemos jugar el partido como si acabase la final al término de los cuarenta minutos. Pero en los últimos instantes del partido debemos saber que no es el final de la eliminatoria. Ahí es cuando debemos pensar en recortar dos o cuatro puntos, o añadir dos o cuatro puntos. Ese es el momento de pensar en que no se acaba ahí, pero en el resto hay que pensar en jugar el partido como uno más, lo mejor posible.»
«Espero que juguemos como en las veces en las que jugamos bien. Siempre intentamos jugar con nuestras mejores virtudes, solo que a veces no aparecen. A veces puedes jugar con cosas diferentes, pero los jugadores deben demostrar lo que saben hacer bien.»
«Seguro que ha habido scouting pero ellos van a jugar básicamente a explotar sus armas. Está claro que si prestas demasiada atención a unos jugadores luego otros te matan. Hay que procurar estar con valentía en todos los ámbitos. Para nosotros estar en la final es un honor y siempre existe posibilidades, por tanto no nos vamos a preocupar demasiado por intentar frenar a uno sí u otro no.»
«Hay un orgullo de saberse finalista de la Eurocup, que es algo muy difícil, y mucho más desde Gran Canaria. Hemos eliminado a campeones de Italia, de Croacia, grandes equipos de Turquía, rusos… Ese orgullo lo tiene toda la afición, y lo demuestra acudiendo con toda su fe al pabellón mañana. Para eso nosotros es un motivo de orgullo.»