El Herbalife Gran Canaria luchó en la primera mitad pero se vio superado en la segunda.
En los prolegómenos del choque Luis Casimiro confirmaba la baja de Anzejs Pasecniks para el exigente duelo en la pista de Hapoel Jerusalén. Una pista que ardía desde una hora antes del inicio del partido con una afición consciente de lo que estaba en juego: un triunfo vital. Porque, a pesar de existir un segundo duelo el viernes y un hipotético tercero, lo cierto es que en una serie al mejor de tres el primer triunfo se antoja fundamental.
Los dos equipos también lo sabían, y se notó en el desarrollo de los primeros compases del choque. Los jugadores de uno y otro lado se mostraron serios, pausados, controladores en cada una de las acciones. Salió fuerte Hapoel Jerusalén con un triple de Peterson y una bandeja fácil de Curtis Jerrells, pero el Herbalife Gran Canaria no tardó en cogerle el ritmo al encuentro. Bo McCalebb vive, desde años, para este tipo de partidos en este tipo de ambientes, y lo demostró con varias acciones de mérito. Una de ellas, una suspensión por encima de Amar’e Stoudemire (8-13, minuto 6) obligó a Pianigiani a pedir tiempo muerto.
Reaccionó el conjunto local gracias a los puntos de Dyson y Stoudemire, que estuvo omnipresente en ambos lados de la pista. Hapoel se encomendaba a sus individualidades y no surtía efecto, en primera instancia, ante un Granca muy concentrado en cada una de las jugadas (16-17).
El ritmo siguió siendo lento en la primera parte del segundo cuarto, pero Hapoel Jerusalén parecía poco a poco tomar las riendas del choque. La intensidad física que imponían sus jugadores era clave; Pianigiani había salido al encuentro con un quinteto íntegramente americano. Con 22-21 en el electrónico, Randle anotó un tiro libre y luego cogió el rebote de su propio fallo para asistir a Dyson en la esquina. Fue la chispa que incendió el segundo acto.
Dyson, ex de Dinamo Sassari y atlético escolta anotador, logró 11 puntos consecutivos con la tímida respuesta de Kuric (34-24, minuto 16) y encendió a la afición local. En los primeros momentos difíciles de la noche, Eulis Báez se erigió como líder. El dominicano frenó a Amar’e Stoudemire en defensa y anotó cinco tantos consecutivos para reconectar a los suyos. Una suspensión de Kinsey sobre el tiempo de juego mandó a Hapoel por delante en el marcador al descanso (39-38).
Superados
Llegó la debacle en el tercer cuarto. Al Herbalife Gran Canaria se le hizo de noche y fue incapaz de encontrar situaciones de tiro para sumar. Por su parte, Hapoel Jerusalén se aprovechó de su superioridad física para generar ventajas en acciones de uno contra uno y encontrar hombres liberados en las esquinas. Una receta simple pero muy efectiva. El conjunto amarillo pronto empezó a naufragar.
Tras seis minutos de cuarto, Herbalife Gran Canaria solo había anotado cinco puntos: un triple en contraataque de Sasu Salin y una suspensión de Bo McCalebb. Dos tiros aislados que eran poco argumento para aspirar al triunfo. Dyson llegaba a los 20 puntos y Luis Casimiro miraba a la mesa (54-43, minuto 26) al ver que la diferencia llegaba a los dobles dígitos. Encontró en Albert Oliver la respuesta al bajo momento de los suyos. El base anotó siete puntos en pocos minutos y permitió a los grancanarios encarar el último envite con siete de desventaja (64-57).
Era corta la diferencia para lo que había llovido pero el temporal estaba lejos de pasar. La tormenta israelí siguió arrasando las ilusiones de un Herbalife Gran Canaria corto en ataque, sin ideas. Pablo Aguilar convirtió un triple reivindicativo fácilmente contrarrestado por Brian Randle en la siguiente jugada con una acción de dos más uno. Kuric, sometido a una defensa asfixiante durante todo el encuentro, no lograba anotar un lanzamiento exterior muy forzado pero Kinsey sí podía convertir un tiro liberado (76-62, minuto 34) que parecía poner la puntilla.
Quedaban más de seis minutos en el reloj de juego pero las sensaciones no acompañaban para confiar en una remontada que no llegó. No solo no llegó, sino que Hapoel Jerusalén tuvo tiempo para aumentar la renta hasta la veintena de puntos. El conjunto hebreo fue superior en todo momento y acabó adjudicándose el primer punto de una guerra que tiene su segunda batalla el viernes a las 20:30 horas en el Gran Canaria Arena. Herbalife Gran Canaria deberá ganar si quiere forzar un tercer enfrentamiento en Jerusalén.