El ala-pívot fue el mejor del equipo amarillo con 8 puntos y 8 rebotes.
«Obviamente, Manresa es un gran equipo y lo está haciendo muy bien, así que era un partido difícil. Es un equipo veterano, que pelea hasta el final y que juega con muy buen ritmo y con mucha inteligencia. Teníamos que trabajar muy bien».
«Hemos mantenido la buena línea de los últimos partidos y solo así íbamos a poder ganar. Debemos seguir jugando así, y trabajando duro».