El pívot amarillo tuvo un papel muy importante en la rotación del equipo en la primera mitad.
«Hemos luchado muy bien, sobre todo en rebote y en la defensa del bloqueo directo. Pero con las pérdidas del último cuarto y la tensión con los árbitros se nos fue el partido. Lo podemos hacer mejor».
«Sí, de eso se trata, de aprovechar la oportunidad, ir al 100% para que la próxima esa confianza sea mayor aún».
«Tenemos que mejorar mucho los terceros y últimos cuartos. Cuando llegamos al último cuarto nos rendimos un poco cuando vamos perdiendo. Bajamos el ritmo y tenemos que mejorarlo, estar juntos en los momentos difíciles».