El entrenador claretiano alabó el trabajo colectivo del equipo durante los cuarenta minutos en Burgos.
«Hemos hecho un partido muy serio en la faceta defensiva durante todo el partido. Hemos cometido algún error, y ellos han tenido tiros libres que no han anotado en la primera parte. Y nos han hecho daño en el rebote ofensivo. A partir del descanso no les permitimos ningún tiro solo, y durante todo el partido hemos sabido compartir el balón, dando buenos pases y sobre todo a quién queríamos. Ha sido un partido serio y equilibrado. Sabíamos que no se iban a entregar, y a pesar de la diferencia en el marcador, el resultado estaba abierto porque es un equipo que siempre lucha y al que hay que ganarle varias veces».
«Cada partido es una historia nueva. A veces se repiten ciertas circunstancias pero ahora mismo el grupo tiene una identidad en el aspecto defensivo, solidez en el aspecto defensivo. Hay momentos en que se junta con la parcela ofensiva y ganamos los partidos. Es un condicionante del trabajo, del esfuerzo del grupo. Los esfuerzos físicos tienen que ser grandes y no valen excusas».
«Al final los partidos te van llevando por caminos. Tenemos gente grande, y hemos sabido rotarles para que no hubiera anotaciones fáciles. Cuando no hemos estado concentrados y hemos permitido tiros, Burgos estaba más metido, pero cuando estuvimos concentrados logramos coger esa ventaja».