El entrenador amarillo alabó la mentalidad del equipo, tras el descanso, para sacudirse «la ansiedad» y remontar el partido.
«Intento quedarme con las cosas que construyen y positivas. Es difícil analizar este partido, un partido tan diferente en las dos partes, muy difícil de analizar. Al principio del partido hemos estado fallando muchos tiros al principio, demasiado ansiosos por querer meternos en partido. Ellos han empezado con acierto, nos hemos puesto nerviosos, con demasiada ansiedad, y se ha visto en las 13 pérdidas a la media parte. En la segunda parte hemos perdido solo 5 balones».
«Del descanso me quedo con dejar esa ansiedad y hacer las cosas que sabemos hacer, ser sólidos en defensa, jugar con energía. Hemos tirado algunos tiros cómodos, otros difíciles pero los hemos anotado. Hemos creído y hemos estado peleando hasta el final. Cada partido es una historia diferente. Hemos sabido arreglarlo en la segunda parte y hemos podido conseguir una victoria realmente difícil. Ellos han hecho un 57% en tiros de dos, un 60% en triples. Es un equipo con jugadores de mucho nivel».
«Yo no tengo una clave. Si tuviese esa clave hubiésemos salido así al principio del partido. Los jugadores han sido capaces de reaccionar y darse cuenta de que teníamos que hacer las cosas que sabíamos hacer. Tirar, correr sin miedo; es un partido de baloncesto, dejar la ansiedad que nos estaba atenazando. Hemos tenido una respuesta muy buena».
«Hoy el público ha estado impresionante. En momentos muy malos ellos han tenido impresionantes. Los jugadores han notado su energía. Hay muchas veces que el equipo tira de la gente y otras que la gente tira del equipo. Se ha notado mucho, la gente nos ha apoyado todo el partido. No tiene demasiado mérito apoyar en momentos buenos pero sí tiene muchísimo mérito apoyar en momentos de la primera parte. Eso ha ayudado a la gente a darse cuenta que podíamos cambiar la cara en la segunda parte».