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Final de infarto para un triunfo histórico (87-86)

El Herbalife Gran Canaria superó al Barça Lassa tras un partido igualado decidido al final.

Estreno de Turkish Airlines EuroLeague en el Gran Canaria Arena con el mismo rival que visitó el recinto de Siete Palmas el día de su inauguración. El Barça Lassa, contrincante, además, en el único título claretiano de la historia, era el invitado de honor a una cita histórica. Un invitado con dos caras muy bien conocidas: las de Kyle Kuric y Kevin Pangos. Dos peligros muy reales.

Tanto, que el escolta estadounidense anotó la primera canasta del choque en el primer ataque. Lo hizo, cómo no, clavando un triple en la cara de DJ Strawberry. Pero el americano del Herbalife Gran Canaria, lejos de achantarse, se presentó al reto. Cogió el guante y la responsabilidad de liderar el ataque isleño. Entre él y Evans sumaron (8-5, minuto 3) para dar ventaja a los amarillos en los compases iniciales.

Se le hizo de noche entonces al cuadro local. La segunda unidad aminoró la producción ofensiva y, al mismo tiempo, los de Pesic supieron aumentar el nivel físico en la defensa para ahogar los intentos isleños. Durante más de cinco minutos, los anfitriones solo anotaron un tiro libre y un parcial de 1-14 comandado por Kuric y Pangos (9-19, minuto 7) forzaba el tiempo muerto de Maldonado. Si bien no evitó que el Barça siguiera sumando, sí consiguió reactivar a los suyos para cerrar el primer acto a solo ocho puntos (18-26).

El Gran Canaria Arena entró en ebullición con el primer minuto y medio de su equipo. Fue lo que tardó Svetislav Pesic en pedir tiempo muerto. La defensa carburaba y dos buenas acciones de la pareja interior Pasecniks-Tillie apretaban el encuentro. Más se apretó cuando Oliver clavaba un triple (25-26, minuto 13) que hacía enloquecer a la parroquia amarilla.

Hannah tuvo un lanzamiento para poner en ventaja a los suyos, pero su triple no entró. El Barça aprovechó una serie de errores locales para recuperar algo de terreno perdido con canastas de Seraphin y Ribas, esta desde más allá de 6,75. Con seis de diferencia, el Herbalife Gran Canaria, lejos de bajar la cabeza, luchó para mantener la inercia positiva a pesar de los errores. Kim Tillie, en sus mejores minutos hasta el momento del curso, clavó un triple para dar oxígeno a los isleños. Tanto aire tomaron que los claretianos fueron capaces de volver a adelantarse (35-33, minuto 16) con un triple de Evans. El ‘Granca’ disfrutó de varios minutos de ventaja, pero al término de la primera mitad todo estaba como empezó: empate (44-44).

 

Un final de infarto

El paso por vestuarios no influyó negativamente en el cuadro de Salva Maldonado. Con un triple de Báez y varias buenas acciones, los locales llegaron a disponer de cuatro puntos de ventaja en los albores del segundo período. Sin embargo, el Barça Lassa volvió a reaccionar y lo hizo de la mano de Kuric. Su muñeca guió a un equipo de Pesic que, durante el nudo de todo el tercer acto, se alimentó a base de tiros libres. Los viajes a la línea de 4,60 fueron recurrentes. Del 53-51 tras triple de Hannah se pasó al 53-57. Todo desde el tiro libre.

Una técnica al banquillo, otra a un Luke Fischer recién entrado en la cancha… El conjunto blaugrana disfrutaba de una ventaja de cuatro puntos (58-62, minuto 28) cimentada en el tiro libre. La diferencia alcanzó los seis tantos, pero en los peores momentos ofensivos del Herbalife Gran Canaria en la noche, la buena noticia era que el Barça Lassa no era capaz de abrir una brecha mayor, insalvable. Mientras, los claretianos se dedicaban a sufrir, a saber sufrir. Un triple de Hannah era respondido por una canasta de Seraphin para cerrar el cuarto (64-69).

Cinco puntos en diez minutos es una renta más que salvable. La afición amarilla apretó de lo lindo desde la grada para ayudar a los suyos y criticar, de forma notable, la actuación de los colegiados. Mediados el último cuarto, el Barça Lassa disfrutaba de una ventaja de siete puntos (70-77, minuto 35) gracias a la labor de Heurtel. El galo, no especialmente inspirado durante la noche, tuvo unos minutos de lucimiento superando a su par y asistiendo a sus compañeros para que encontraran la canasta con facilidad.

La cadencia del encuentro no invitaba a muchas esperanzas, pero el Herbalife Gran Canaria no le perdía la cara al encuentro. La pareja DJ Strawberry-Chris Evans se alió para incendiar las gradas del Gran Canaria Arena. Este último fue el gran artífice de una remontada para la historia. No solo por los puntos -mayores se han logrado- sino por la importancia. Evans sumó seis tantos consecutivos con un mate tras robo (81-82, minuto 38) que a 2:27 minutos del final levantó a la afición para no volver a sentarse.

A un minuto del final, Tillie colocaba un increíble gorro a Singleton que los árbitros señalaban como falta. Con 59,8 segundos por disputarse, el Barça recobraba vida con un punto de ventaja. Y el 85-86 no se movió del luminoso hasta que quedaban, solo, 3,6 segundos. Hannah recibía falta, y se iba al tiro libre. Desde la línea de 4,60, el base sumaba dos puntos.

Dos puntos para la historia. Para un triunfo clave que queda en el recuerdo del club.